top of page
Foto del escritorLaura Solano

A veces, lo mejor que puedes hacer es no hacer nada.



El concepto de "no-tiempo".

Muchas de las mejores ideas de Einstein se le ocurrieron mientras flotaba en el agua en su velero de 23 pies en una tarde sin brisa. Contrariamente a la opinión popular, Steve Jobs era un procrastinador excepcional, dado a soñar despierto y aparentemente ausente de pensar en ideas que revolucionarían el trabajo y el juego. Ambos sobresalieron en el campo de la incubación de ideas, utilizando algo que los investigadores llaman no-tiempo.

Después de un día largo y estresante, muchos de nosotros anhelamos y nos damos un poco de tiempo de inactividad, pero con demasiada frecuencia, cuando nuestra lista de tareas pendientes es demasiado larga, no programamos suficiente tiempo para descansar y hacer, bueno, nada. En nuestra sociedad siempre activa, el descanso tiene mala reputación. Las demandas laborales, familiares y sociales a menudo nos hacen sentir culpables por no hacer nada. Pero quiero reformular eso y hablar sobre cómo programar y honrar nuestro "no-tiempo" es una parte fundamental en nuestro viaje de crianza de los hijos.

Por supuesto, los Kabbalistas han estado familiarizados con esta idea durante miles de años. Todos los viernes al atardecer comienza el tiempo conocido como Shabat, y concluye con la puesta del sol el sábado por la noche. Los Kabbalistas explican que en Shabat, los mundos espiritual y físico se unen y la Luz fluye para nosotros durante todo el día. Ahora te estarás preguntando qué trabajo espiritual debes hacer para conectarte con esta Luz de Shabat. Paradójicamente, ¡descansa! Sí, los Kabbalistas enseñan que nuestro trabajo en Shabat es desistir, calmar nuestras preocupaciones de la semana laboral, dejar de lado nuestros teléfonos y simplemente estar con nuestros amigos, nuestra familia y nuestros pensamientos.

Lo que los Kabbalistas, Einstein y Steve Jobs entendieron es que nuestro tiempo de inactividad es a menudo cuando hacemos nuestro mejor pensamiento y resolución de problemas. Somos mejores, más creativos y más en sintonía con el universo y nuestro lugar en él cuando nos permitimos la habitación para desconectarnos.

Entonces, a medida que enfocamos nuestro enfoque en la crianza de los hijos y programamos nuestras nuevas rutinas, quiero enfatizar la importancia de programar el tiempo libre en nuestro calendario también. Envíate una invitación a no hacer nada, y cuando recibas los recordatorios, tu padre interior estará sonriendo contigo.

Creo que puedes, y te cuidarás lo mejor posible en los próximos días y semanas. ¡Después de todo, mamá (y papá) siempre saben más!






1 visualización0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Comments


bottom of page